¿Baja autoestima? No estas sola
El amor propio tiende a mermar en diferentes etapas de la vida. Sobretodo en nosotras, las mujeres.
Cuando le sumas síntomas (puedes tener SOP o presentar hiperandrogenismo) como pelito en zonas más «masculinas», acné frecuente, alopecia por la zona anterior de la cabeza, algunos kilos de más por aquí y por allá, etc. aún se acentúa más, reflejándose en múltiples ámbitos de nuestra vida.
Si te sientes identificada, si esta falta de autoestima ha hecho que no vayas a la piscina por esos pelitos, has decidido no ir a esa cena de clase por no engordar más de la cuenta, no has podido disfrutar de tus relaciones en pareja (es lo más frecuente)… en fin, que han influenciado seriamente tu vida, sigue leyendo.
Aprecio hacia una misma
Eso es la autoestima.
¿Verdad que nos gusta que nos cuiden? ¿Que nos den cariño? ¿Que nos mimen?
¿Será por qué no somos capaces de hacerlo nosotras hacia nosotras mismas? Y es por eso seguramente que no dejamos de buscar que otras personas nos den aquello que no somos capaces de darnos nosotras.
Cuando me di cuenta de eso, algo cambió en mí.
Quiero contarte que yo he pasado dos grandes baches de autoestima debido al SOP, o mejor, a sus consecuencias. La primera vez fue en la adolescencia, cuando tenía bastante hirsutismo, poquito cabello en el flequillo (siempre me lo hacia para que no se viera mi frente) y un acné muy considerable (mi padre decía que tenía el camino De Santiago). Las personas del cole se metían conmigo por mi entrecejo, por los pelos en mis piernas cuando hacíamos piscina o mi bigote. Sí, por presión social empecé a depilarme. ¿Te suena esta historia?
El segundo bache ha sido en el post parto, ahora mismo. Mi cuerpo se ha quedado distinto. Vuelvo a estar pequeñita (mi ideal de belleza es verme más fuerte), más fofa y mi barriga es un poco más blanda y grande que antes (resultado de tener SOP y el embarazo). Además, duermo poco (Lara es muy demandante) y me veo ojeras constantemente, me crece mucho el vello corporal y un sinfín de cosas más.
Ahora estoy trabajando mucho en ello y gracias al curso de LoveMe de Elena Hg lo estoy consiguiendo. Ojalá pueda servirte a ti también si lo necesitas (no gano nada con esta recomendación).
¿Qué historia te estás contando?
El autoconcepto es lo que piensas sobre ti misma. Qué historia la cuentas a tu cerebro sobre ti.
Esto tiene una importancia tan y tan grande que no podría hacértelo entender en un solo post.
Tenemos un sistema cerebral llamado sistema de activación reticular (SAR) que nos filtra aquello que nos interesa o, de lo contrario, lo que no nos interesa pero nos seguimos diciendo constantemente. Por ejemplo, cuando te miras al espejo y tienes como creencia principal «qué pelos, qué cara, qué barriga, qué culo…¡qué fea!» siempre vas a fijarte en lo que NO te gusta de ti, sin ni siquiera darle oportunidad a tu mente para fijarse en lo que SÍ le gusta.
La consciencia permite el cambio, la autogestión y el cambio completo de tu vida. Date la oportunidad de descubrirlo.
La funcionalidad de tu cuerpo
¿En qué momento se nos ha ido tanto la cabeza? Pregunta que me hago muy a menudo.
¿En qué dichoso instante hemos dejado que nos invada la idea de que lo que se ve es tan importante como para apagarnos por dentro?
Querida, esta entrada/post es para decirte que ojalá cada vez que te miras al espejo no solo te dijeras «¡GUAPA!», sino que te pudieras ver por dentro, por debajo de la piel, y valorar todo eso que tienes. Esa inteligencia, esas ganas y entrega por la vida, tus órganos y todo el fluir de tu energía.
Por que sí, somos algo más. SOMOS MUCHO MÁS que lo que vemos.
Este cuerpo, que no se te olvide nunca, TE PERMITE VIVIR. Te permite correr, caminar, comer, pensar y razonar, comunicar, ayudar a los demás, amar y celebrar.