Microbiota y kombucha, VIRUS: en épocas de catarro es importante reforzar nuestra microbiota por la estrecha relación que tiene con el sistema inmune.
Microbiota y ciclo menstrual: sobre todo su relación con los estrógenos, muy importante y muy especial porque podemos fomentar su mejora con la nutrición.
Vientre hinchado, gases, malestar… es un post muy completo donde puedes aprender sobre el sistema digestivo de forma sencilla y cómo aliviarlo.
¡Vamos con la elaboración!
Scooby
Antes de empezar, si pueden regalarte un scoby (es la colonia simbiótica de bacterias y levaduras) solo tendrás que comprar té, azúcar moreno (puede ser normal, a mí me gusta más integral) y los materiales.
Té, fermentado y ¡listo!
Hervimos 100 ml de agua y hacemos el té (idealmente que sea de buena calidad), sin quemarlo.
Dejamos reposar 8 minutos, aproximadamente.
Colamos el té y añadimos la mezcla en un recipiente grande, donde quepa 1L de agua añadido y a temperatura ambiente.
Integramos con 100 g de azúcar.
Añadimos nuestro Scooby: esta colonia es la que se encarga de comerse el azúcar y crear el té fermentado, nuestro té kombucha.
Esperamos entre 8 y 15 días, depende de lo dulce o «avinagrado» que nos guste. Personalmente me gusta más tiempo porque sus beneficios son mayores 🙂
Te dejo un vídeo con la explicación sencilla y rápida: aquí.
Espero que te ayude a crear tu propio té kombucha en casa, la verdad es que es muy sencillo y un lujo disponer de una bebida tan potente al alcance de nuestro sistema digestivo, microbiota e inmunidad.